Otra vez los recuerdos - Marichoni
- Marichoni

- Nov 13
- 2 min read

No me olvides, guárdame en la memoria.
Los recuerdos son esas escenas que integramos a nuestro ser, que guardamos en lo más recóndito del alma y que, ante cualquier detonador, salen a la luz y se convierten en presente.
Esa caja llena de curiosidades que llamamos memoria, reelabora las escenas, las retoca y modifica y las guarda, pulidas y embellecidas.
Así es como vamos construyendo eso que llamamos recuerdos y que, en momentos de soledad, se antoja sacarlos de esa bella caja y volverlos a contemplar.
Tal vez aquella escena que hemos extraído de nuestra caja y queremos recordar, antes de guardarla haya sido iluminada y recortada, como hacemos con las fotografías de las que enmarcamos solo lo que queremos conservar y dejarla como nos hubiera gustado que fuera en el original.
Como ya no importa la precisión, cuando la rememoramos, la volvemos a vivir y la vivenciamos como nos hubiera gustado que hubiera sido de verdad. Lo que hubiera representado dolor, lo hemos desaparecido y hemos dejamos solo lo que nos habla de momentos de felicidad.
Maravillosa transformación que hace la memoria, trabajo de pulimento y refinamiento, para convertir el recuerdo en verdadera obra de arte de una vivencia que ya olvidamos como fue en la realidad, pero que ahora, reconstruida, la guardamos y la clasificamos porque es así como la pudimos archivar.
A veces se cree que recordar es volver a vivir y yo sostengo que es reconstruir, aderezar y volver a sentir en el hoy toda la bondad, porque así es como quiero recordar.
Parece que la fantasía es una fuente de inspiración y de trabajo cuando buscamos que algo se guarde con un deseo de que permanezca y se quede para siempre en nuestro ser.
Tal vez por ello, cuando relatamos nuestra vida parece una pintura llena de luz y buenos momentos.
¿Tendrá responsabilidad la fantasía en cada escena que he conservado como recuerdo? o será importante guardarlas como se hace con un retrato que muestra absoluta fidelidad.
No, creo que los recuerdos tienen un poco de verdad y un mucho de imaginación, solo así los puedo guardar para que, habiendo pertenecido al pasado, sean, en el presente, inspiración y alimento para revivir y revalorar aquello que un día la memoria optó por conservar.
Ilustración: Fotografía de Debbie Hudson en Unsplash






Comments