Acabó un año más y a lo que vivimos en él, gratitud eterna.
A las alegrÃas obtenidas, aprecio, multiplicación y recuerdos.
   A las experiencias recibidas, sentido y valoración, nos cambiaron.
   A las dificultades asumidas, agradecimiento y aceptación, les ganamos.
   A los aciertos logrados, reconocimiento y proyección, ya son nuestros.
   A los dÃas con sol, admiración y atesoramiento, nos dieron calor.
   A los dÃas con lluvia, aprovechamiento como actos de vida.
   A los dÃas frÃos, abrigo y disfrute, nunca fueron demasiados.
   Al trabajo, dedicación y mucha reflexión, hay que hacerlo con calidad
   Al fruto del trabajo, disfrute y buena administración, fue una solución.
   Al esfuerzo requerido, ánimo y adelante, Aurrera en lengua euskera.
   A la distancia fÃsica, mayor y más cuidadosa presencia.
   A la cercanÃa, gratitud, aceptación y constancia, está para nuestro gozo.
   Al amanecer de cada mañana, buenos y fructÃferos dÃas.
   Al atardecer, adiós al sol, gracias y dennos otra oportunidad.
   A lo que venga e ignoramos, conciencia y oportunidad de renovación
   A la esperanza, respuesta inmediata y comunicación para proyectarla.
   A quienes me aprecian, gracias por ello, cuento con ustedes y siempre estaré para responderles.
   A quienes les incomodo, un ni modo, eso también es parte de la realidad.
   A quien canta y hace poesÃa, gratitud merecida, su obra la hago mÃa.
   A los amores, acrecentamiento y cuidados intensivos.
   Al recuerdo de mis padres, abuelos y tÃas, he procurado y procuraré honrarlos cada dÃa.
   A los hermanos todo mi cariño y mi solidaridad. Lo quiero desde siempre.
   A los sobrinos, amor por ser espejo de complicidad.
   A los primos, gracias por ser y existir, tenemos un algo en común.
   A los amigos, respuesta amorosa al mismo o mayor nivel.
   A los hijos mÃos y por consiguiente, nueras y yernos, todo lo que hay dentro y fuera del corazón. Nada puedo escatimarles.
   A los nietos, mi sentido de vida y mi posibilidad de existir, son el gran premio por vivir. Y…
   A Dios gracias por hacerme digna de ser y estar, por creer en mi y escuchar mi ruego y por la respuesta personalizada y definida dada claramente para mÃ.
Ilustración: FotografÃa del Archivo de la propia Autora.