top of page

Los deseos: ¿los mantengo o los suelto? - Marichoni

Desear ¿valen la pena?
O mejor los suelto.

 



 

    ¿Cuántos deseos he tenido en la vida? Infinidad, de todo orden y en todos sentidos. Desde que tengo uso de razón, identifico que he tenido deseos.


    Nunca he deseado ser otra persona diferente a la que soy, pero sí he deseado hacer o tener algunas cosas de quien me rodea: A veces más dinero contante y sonante, pero como he sido gastalona, no lo conseguí, sin embargo, cuento con mi seguridad económica y mis necesidades están bien cubiertas, ese deseo ya lo deseché.


    Siempre he deseado tener la oportunidad de decir algunas cosas que me he callado, a veces por miedo y otras por prudencia, aunque no son tantas ni yo tan prudente, pero sí representan un deseo insatisfecho que no he conseguido, solo lo he podido subsanar con conversaciones de monólogo en las que me digo, me pregunto y me respondo. Sigo pensando cuánto me gustaría decir algunas cosas que se han mantenido en el silencio, en la disque prudencia y en el disque respeto.


    Otro deseo que me quedó insatisfecho, y ese sí para toda la vida, fue el haber podido cantar con buena voz y entonación y con la decisión de hacerlo frente a otras personas. Ese sí, por imposible, ya lo deseché pues ahorita ni siquiera me queda aquel chorro de voz.


    Tal vez hay temporal o momentáneamente algunos deseos que surgieron y no conseguí como cambiar mi mobiliario por verdaderas antigüedades de algunas casas reales, un jardín de flores diversas, de esas que se ven en algunos de los jardines principescos, puras necedades, que, una vez entendidas como necedades, las deseché por inútiles y por pensar en el gran trabajo que me habrían representado.


    Sin embargo, hay por allí otros deseos escondidos y que no he confesado a nadie: tener para los demás algo de inolvidable, no perderme en el olvido para la gente con la que me he relacionado ¿por qué? Creo que solo por pura vanidad, y por absurdo es un deseo a desechar.


    Pero, a mis más de ocho décadas, la mera verdad, ya mis deseos no son para mí, son solamente el bienestar de los míos, su salud y la unión que mantengan entre ellos, porque creo que en eso sí, siempre quedará algo de mí más allá de mí.



Ilustración: Imagen de Ronaldo Liu en Unsplash

17 views0 comments

Recent Posts

See All
Post: Blog2_Post
bottom of page